Trágame treinta: Caídas desde el tercer piso

Autor: Publiko 27 junio, 2018

Como cuando era niña y soltaba a mi mamá

Iba caminando por el tianguis con mi chico de la mano y cuando me di cuenta, ya estaba tratando de agarrarle la mano a otro wey y hablando con él (me di cuenta porque no se dejaba agarrar y ya le iba a reclamar). No sé en qué momento nos separamos ni cómo pasó. El chico nuevo estaba más confundido que yo. Si hubiera podido correr por vergüenza, lo hubiera hecho, pero había mucha gente.

Ale, 30 años

Ejercitándome duro

Me puse muy intensa en mi clase de spinning y se me rompió el pantalón justo de la costura de las nalgas. Si hubiera reaccionado rápido, quizás no hubiera sido tan vergonzoso, pero me di cuenta hasta que acabó la clase y me bajé de la bici. Al menos traía bonitos calzones para quien haya visto 40 minutos de mi trasero.

Anónima, 32 años

Sueño

Estaba en el trabajo muerta de sueño y no podía dejar de bostezar. Llegué a ese punto de los bostezos en el que se me salió la baba. Trabajo en una oficina con mucha gente, así que por lo menos mis compañeros de enfrente y a los lados vieron semejante estupidez. Cayó poquita en el teclado de mi compu y sin saber si lo habían notado o no, no la limpié para no llamar su atención hacia eso, pero mi compañera de enfrente me pasó un pañuelo sin decirme nada. Supongo que todos saben que mi teclado ahora es un foco de bacterias de baba.

Anónima, 30 años

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