Handel: la belleza de lo atroz
Autor: Publiko 29 junio, 2018
Se habla de los incontables problemas en nuestro país que involucran a la violencia, el narcotráfico y al crimen organizado. Se cuentan historias terribles, instaladas en la rutina de una población sometida a una cotidianidad surreal, donde la supervivencia está ligada a la búsqueda de la belleza: única salida de una realidad enferma. Realidad que permite la apropiación, la venta sistematizada de seres humanos, el tráfico de personas, el despojo de aquellos elementos auto designados que guardamos entre nuestros huesos.
Handel, una obra de Diego Álvarez Robledo y dirigida por Luis Eduardo Yee, nos plantea una “ficción documentada” capaz de arrastrarte al núcleo de la trata de personas. Un texto que se desliza entre la piel del espectador, logra un juego poético: destructor de expectativas. Tres historias se pasean entre una mesa y una silla, todas con un fantástico desarrollo de personajes que permite encarnar cada narración.
La actuación de Pablo Marín, Sofía Sylwin y Miguel Romero, retan a lo real. Es fácil afirmar que se logra encontrar el punto exacto en el que lo grotesco y lo sublime derivan en la belleza. Existe una armonía y manejo del espacio, que permite pasar las horas con un sentimiento de culpa placentera: atrocidad desbordada, fiel acompañante de la dulzura. El diseño sonoro consiste en una guitarra acústica, de la mano de Isaí Flores, que nos guía durante toda la obra, arrulla con arpegios y pretende encapsular al universo hostil que se monta en escena.
Handel es, sin duda alguna, una obra que no puede pasar desapercibida. Esta es su cuarta edición y la puedes ver en el Centro Cultural Helénico, en el Foro la Gruta Helénico, los martes a las 20:30 pm. Estará hasta el 11 de septiembre.