¡No por favor! 5 mitos sobre el sexo en los que seguro aún crees
Autor: admin publiko 25 octubre, 2018
A pesar de estar en una época muy open mind, la realidad es que aún existen ciertos mitos alrededor del sexo, desde los orgasmos hasta cómo evitar un embarazo, así que para que en serio los elimines de tu vida, échales un ojo a los cinco más comunes:
1.- “El himen es símbolo de virginidad”
No es así, el himen solo es una membrana que inclusive muchas mujeres no tienen desde el nacimiento. Algunos se rompen hasta la primera relación sexual, pero otros pueden perderse con una actividad física intensa o un golpe brusco, así que no es prueba de nada.
2.- “El tamaño del pene no importa”
En diferencia de uno o dos centímetros está claro que no tiene mayor relevancia, pero si es muy pequeño la penetración puede no ser tan buena, sin embargo eso no significa que la relación sexual no sea satisfactoria pues hay más elementos como ayudarse de la masturbación o el sexo oral para conseguir todo el placer.
3.-“Con alcohol sabe más rico”
Uno de los mitos más recientes es considerar que al estar alcoholizados obtendremos más placer, pero esto puede ser contraproducente, pues aunque sí, esta bebida te ayudará a desinhibirte, en exceso puede provocar impotencia o falta de sensibilidad.
4.- “Solo los hombres se masturban”
¡Error! En la era del feminismo, debemos aceptar que las mujeres también tienen derecho al placer, así que la masturbación también forma parte de su vida diaria, también ven pornografía y claro que les gusta hablar de eso.
5.- “Si me vengo afuera no te embarazas”
Uno de los más grandes mitos, que ha sido culpable de que muchos ya anden comprando pañales y útiles escolares. Recuerda que ningún método anticonceptivo es 100% eficaz, y mucho menos el coitus interruptus, pues los espermatozoides no solo viven en el semen, también se encuentran en el líquido preeyaculatorio, así que sí hay penetración, claro que puede haber embarazo, ¡aguas!
Lo mejor siempre es informarte con un especialista ante cualquier situación, pero ¿a poco no le atinamos a algunos en los que todavía creías?