¿Le has intentado dar plátano? 15 cosas que odian los gatos
Autor: Armando Garcés 29 octubre, 2018
En ocasiones por desconocimiento podemos actuar de una forma no adecuada para con alguien más, es importante para la relación con nuestras mascotas, saber cuáles son las cosas que los hacen sentir mal o las que simplemente les desagradan.
Aquí una lista con 15 cosas que tu gato seguro odia
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Las miradas fijas
Así como sucede con otros animales, los gatos, entienden las miradas fijas como una potencial amenaza, como si los estuvieras analizando para aproximarte a ellos, cazarlos o atacar. Ten cuidado con el contacto visual y la comunicación corporal que tienes con tu gato. Cuando se sienten cómodos los mininos, sueles cerrar y abrir sus ojos lentamente, si les haces este gesto, les comunicarás que no hay de qué preocuparse.
Los líquidos, como el agua
Es verdad, hay gatos como los bosques de Noruega, los siberianos y los Maine Coon que disfrutan metiéndose al agua, la mayoría detesta esta actividad. La razón que han dado los científicos es su ascendencia de especies de zonas desérticas de Medio Oriente y China.
Debido a esto la relación que han tenido con el agua ha sido nula, causando desconfianza por instinto.
Los cítricos como el limón
Una manera muy buena y natural de evitar que tu gato se acerque a determinadas áreas de la casa es aplicar, a muebles o cables, un poco de esta fruta, ya sean extractos o simplemente frotar medio limón será suficiente. No les gusta nada el olor de este cítrico.
La suciedad
Los gatos son animales muy muy limpios. Así que no interfieras con su vida limpia ni con sus cosas. Procura mantener su arena nueva, si ya la utilizó necesita que la cambies, si no lo haces, lo estarás molestando e incluso podría ser una invitación a que haga sus necesidades en otra parte de la casa.
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Los sonidos fuertes
Los sonidos estruendosos molestan mucho a los gatos. Ya sean gritos, música de fiesta a máximo volumen, cláxones, fuegos artificiales, este tipo de ruidos fuertes pueden espantar a tu gato, incluso causarle estrés y ansiedad.
Las caricias en distintas zonas
Aunque hay gatos que viven para ser acariciados, a la mayoría de ellos no les gusta en lo absoluto tu voluntad para darles amor, especialmente en zonas donde tienen mayor sensibilidad.
Los plátanos
Como te decíamos, aunque no tienen el olfato de un sabueso, hay olores característicos que no les gustan, entre esos olores destaca el del plátano.
Los olores fuertes
A pesar que el olfato gatuno no es tan potente como el de los perros, sigue siendo sensible a olores como el del ajo, el tabaco, la marihuana, el vinagre o los cítricos. Resultándoles muy fuertes y molestos.
Retenerlo por la fuerza
Si coges a un gato y notas su incomodidad deberías soltarlo, sino es que el minino por todos su medios ya ha logrado zafarse. Aunque recordando siempre hay excepciones debes tener cuidado, pues, la mayoría de los gatos odia ser cargados y más boca arriba o en posiciones donde se sienten vulnerables.
Los cambios de casa
A los gatos no les gustan los cambios drásticos, eso incluye las mudanzas. Desmantelar su lugar de vivienda o como ellos lo piensan (sus dominios) para luego meter todo en cajas inclusive a meter a tu gato en una jaula y transportarse a un nuevo sitio, con nuevos olores, sonidos, etc, no les gusta nada.
Los cambios en su rutina
Los gatos son rutinarios y si quieres cambiar algo en su vida o en la tuya afectándolo a él, deberás tener precauciones y hacerlo de forma gradual y con tacto.
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Que les pongas demasiada atención
La voluntad de los gatos es principal en sus vidas. Sino tiene la intención de jugar contigo, o dejar que lo acaricies el simple intento de hacerlo puede resultarle muy molesto. Prefieren que les des su espacio y que ellos te busquen si quieren o necesitan tu atención.
Viajar en coche
Obviamente les molesta viajar en coche. Primero los sujetas a la fuerza y le cargas para meterlo dentro de una jaula o directamente libre en el coche, con un motor ruidoso, olores desconocidos, calles, gente y otras cosas en las ventanas y además de todo se mueve velozmente.
Que les ignoren
Ni muy muy, ni tan tan. A los gatos no les gustan los mimos en exceso, pero tampoco que ni los peles. Llegará un punto en el que tu gato querrá tus caricias y si no satisfaces sus deseos, después podrías pagarlo.
Las puertas cerradas
Los gatos odian que los controles y limites, de ahí que aborrezcan las puertas cerradas, porque les impiden tener acceso a toda la casa que consideran su reino y porque no puede con no saber y poder ver en todo momento, lo que ocurre en cada rincón de su territorio.